Padre e hija disfrutaron de la tranquilidad que les proporcionó la gran cabaña en la que se alojaron durante su tiempo en la prestigiosa finca The Greenbrier, y ambos se dejaron ver en varias ocasiones disfrutando de largos paseos por los idílicos paisajes que rodean las instalaciones, una foto familiar que pone de manifiesto la dedicación con la que el intérprete se toma su papel de padre.
Según revela el diario The New York Post, Cruise y Suri también aprovecharon buena parte de su estancia para degustar los numerosos sabores de helados que ofrecía uno de los establecimientos integrados en el complejo de ocio, aunque para cenar ambos prefirieron refugiarse en su vivienda y fue el actor -conocido por su pasión por la cocina- quien deleitó a la niña con su amplia experiencia como chef aficionado.
Aunque Tom Cruise tiene también otros dos hijos adolescentes, fruto de su matrimonio anterior con Nicole Kidman (Isabella, de 20 años, y Connor, de 18), el veterano intérprete solo se ha dejado ver con Suri en sus últimas apariciones públicas, unos encuentros familiares que se han intensificado desde que Tom y Katie se divorciaron en junio del año pasado. Y la mayoría de las veces en que padre e hija han querido disfrutar de unas vacaciones para estrechar su vínculo, ha hecho acto de presencia el famoso jet privado que posee el artista, siempre listo en su helipuerto de Manhattan para reunir a la pareja con la mayor brevedad posible para no perder ni un minuto de las pocas horas que ambos pueden pasar juntos.
Fuente: elespectador.com; Fotografía de diariofemenino.com